Elena Villarreal, representación de la mujer actual
Elena Villarreal representa a todas las “mujeres Ultra”. Fundadora de Grupo Ultrafemme, fue más allá de su realidad en su momento y creó el entorno que hoy la envuelve: el de la belleza, el cuidado personal y la elegancia.
Con su concepto UltraFemme, en el principal polo turístico de México, introdujo las mejores marcas de perfumes y artículos de belleza en una época en la que Cancún apenas nacía.
Actualmente, Villarreal es referente de la elegancia y la belleza en el Caribe Mexicano. Lo que hoy son anécdotas pusieron a prueba su espíritu emprendedor, su tenacidad, su confianza y su fe en su proyecto para llegar a convertirse en la líder de conceptos como Luxury Avenue, el lugar del glamour y la moda ícono de Cancún.
- Su trayectoria inspira a seguir nuestros sueños… ¿qué consejos le daría a aquellas mujeres que buscan emprender?
“Que perseveren, que no se rindan a la primera, que si tienen un sueño que lo sigan. Siempre va a haber personas que te digan que no se puede, que está difícil, que es una locura, pero con un plan, con un concepto y con trabajo se puede salir adelante con cualquier sueño.
Yo llegué a Chetumal desde los Estados Unidos, para apoyar en ese momento a quien era mi marido en el negocio de su padre, en una tienda de abarrotes y así abrimos un súper. Tras un año le dije a Pepe que quería emprender otro negocio.
Entonces pensé en vender perfumes, porque siempre había sido mi sueño el mundo de la belleza, veía las revistas de Vogue y Glamour…así que puse mi tienda muy bonita, íbamos a buscar los productos a Belice pero me faltaban muchas marcas. Entonces, fuimos a Panamá por los perfumes, así que eso no nos limitó. Lo que se debe hacer es ponerse a trabajar, perseverar y que… pase, lo que pase.
No tengan miedo, no quiten el dedo del renglón y diario hagan algo que quieran.
- ¿Considera que esta época es más fácil para las mujeres?
Si, de alguna manera, porque hay muchas mujeres que ya nos han demostrado que pueden y dijeron soy mujer, voy a poder hacerlo. Cuántas mujeres atletas, que han roto récords y cumplido logros. Entonces, les repito, que confíen en sí mismas pero también estudien y capacítense. Actualmente hay una infinidad de información y aquí es importante no decir “No se pudo, no sé o como mis papás no me pagaron la universidad”, el famoso ¡es qué…! al que después le sigue “No pude, no hice”.
Hay que ser formal, disciplinados, confiar en que lo que haces es lo que quieres, debes ser exigente contigo misma y con quienes te van a ayudar.
- ¿Cuál ha sido el momento o los momentos más difíciles para grupo ultra y cómo ha salido adelante?
Han sido varios. Hemos pasado desde huracanes, devaluaciones y recientemente la pandemia.
Cuando llegué de EU, el idioma se me complicaba, la moneda, el hecho de que las leyes no te apoyaran se me complicaba, porque yo venía de un lugar muy estructurado.
En 1982, viene una de las gigantescas devaluaciones y decidimos cerrar las tiendas de Chetumal y cambiarnos a Cancún. A mis proveedores les dije que me iba y ellos respondieron “Si te vas a Cancún, todos te vamos a vender” y me sentí muy agradecida.
A veces las bendiciones vienen disfrazadas de tragedia, porque eso fue para mí… cerrar, despedir a mi personal, a todas mis niñas a las que había formado. Fue un trago muy amargo. En Cancún no había vivienda y vivimos en una bodega del hermano de mi amiga Martha durante un tiempo.
Debes pensar que todo es temporal, y que todo pasará si te enfocas. Tras un año tratando de conseguir mi tienda de la Av. Tulum nos instalamos. Pero llegó el huracán. Entonces, esto nos muestra que hay que estar preparados y si eres bueno con la gente, te ayuda, te respeta. Hemos conseguido sembrar aspectos positivos y cuando es un bien para todos, el universo confabula para que todo saliera como debía ser.
Con la pandemia turnamos al personal, pero al final tuvimos que despedir a 300 empleados, no había manera, cerramos algunas tiendas, consolidamos, era lo que se tenía que hacer.
- ¿Cómo es el comprador de hoy, ¿qué exige, qué busca?
Es mucho más conocedor. Antes de comprar ya revisó el producto en internet, ya sabe qué hace, cuánto cuesta, viene mejor informado. Tienes una generación nueva que viene con otras necesidades que busca productos más naturales, que quiere saber si las marcas son orgánicas.
Te tienes que adaptar a las necesidades. Hay muchos productos, pero también hay muchas diferentes capacidades de bolsillo, desde quien puede pagar 30 mil pesos por una crema y quien paga 500 pesos.
Debes enfocarte y siempre brindar el mejor servicio al cliente, darle lo que busca y estar preparada para cualquier pregunta. Ya no es el cliente de antes, ahora tienen muchas más información.
Además, también se compran los productos por internet y con la pandemia y los protocolos sanitarios es muy difícil para una empresa que se dedica a la belleza, a sentir el aroma del perfume, conocer el producto, las texturas…
- ¿Cómo han afrontado el crecimiento exponencial de las compras en línea?
Ha sido un reto porque las personas estaban acostumbradas al apapacho, a hacerse el facial, el maquillaje…es un negocio que depende mucho del toque personal con el cliente y se ha tenido que adaptar a estas nuevas maneras de vender.
Lanzamos nuestra página de venta online y desarrollamos un software interno que se llama GUDIS (GRUPO ULTRAFEMME DISTANCE SALE) donde el cliente llama, solicita sus productos y se les envían a su casa.
- Para algunos especialistas el mundo de la belleza y de la moda apunta a ser más natural, menos superfluo y con productos sustentables, porque hay mayor conciencia social. por otra parte, otros afirman que el mercado de lujo ha tenido mayor demanda ¿con qué punto de vista coincide?
Las dos tendencias son actuales. Existe el cliente que busca lo natural, lo orgánico, lo no testeado con animales, pero también es cierto que el mega lujo permanece.
Por ejemplo, nosotros contamos con un producto nuevo, natural y local que se llama Néctar Maya, hecho con aloé vera, por lo que cuando los clientes prefieren algo de la región, por ejemplo para una quemadura de sol o desinfectantes con aloé vera, tenemos este producto con el que ayudamos a una emprendedora de local. Esto con la idea de promover productos naturales y sustentables a ese mercado que lo solicita.
- Luxury avenue en pasado, presente y futuro…
Somos pequeños. Nuestras instalaciones están a escala humana, todo está muy bien acomodado, con aire acondicionado, mucha seguridad, un buen estacionamiento, tiene esas ventajas. Para nosotros es reinventarnos con lo que necesita y le interesa al cliente.
Por ejemplo, instalamos una galería para el turismo y para apoyar a los artistas de la zona, porque no había un lugar en Cancún con artistas de locales. Aquí tienen un espacio con la seguridad de que sus obras están cuidadas.
Estamos en remodelación de espacios, de traer marcas nuevas. El bar se reactivó, ya que no había dónde tomarse un café, una copa de vino. Reabriremos el kids club, para que los padres puedan hacer sus compras sin presiones. Con esto y otros servicios ofrecemos atenciones que el cliente espera.
- ¿Perspectivas del 2022?
El turismo va a seguir viniendo, el crecimiento de Cancún hacia Isla Blanca es increíble, por lo que nos estamos preparando. No hay que sentarse a esperar que las cosas sucedan, sino que cuando sucedan, debemos estar listos. Todo lo que es la Riviera Maya y Tulum tienen un gran crecimiento y belleza. Somos muy afortunados.
- ¿Quedan sueños por cumplir?
Estoy en la etapa de contribuir, porque he sido tan afortunada que estoy sumamente agradecida con la vida. He estado pensado, qué puedo hacer, qué puedo enseñar, porque estoy muy consciente de que hay mucha gente necesitada que queremos apoyar, ser parte de un todo.
Un proyecto que está por cumplirse es el relanzamiento del perfume de Cancún que nació como un recuerdo del destino, de su belleza y al mismo tiempo lo promovía.
Tengo una empresa muy bien estructurada con gente muy capaz que, gracias a Dios, hacen todo. Yo solamente propongo algunos temas, pero también los dejo que propongan e implementen, porque ellos también tienen ideas, quieren crecer, desarrollarse.
Estoy muy orgullosa de todos los que colaboran con nosotros. Es increíble trabajar en esta empresa, en un entorno de lujo, limpio, de artículos lindos, al que los clientes vienen con una necesidad de alagarse así mismos, consentirse y sentirse bien.